18. En la calle. Calais. Sterne, Laurence. 1917. Un viaje sentimental a través de Francia e Italia. Vol.. III, Parte 1. Harvard Classics estante de la ficción

Ficción> Harvard Classics> Laurence Sterne> A Sentimental Journey a través de Francia e Italia> 18. En la calle. Calais

Laurence Sterne. (1713-1768). Un viaje sentimental a través de Francia e Italia.

El Harvard Classics Shelf of Fiction. 1917.



18. En la calle. Calais



Yo nunca terminé una ganga doce guinea tan rápidamente en mi vida: mi tiempo parecía pesada sobre la pérdida de la dama, y ??sabiendo en cada momento de que sería como dos, hasta que me puse en movimiento-Pedí caballos de posta directamente, y se dirigió hacia el hotel. 1

Señor! Dije que, al oír el reloj de la ciudad huelga de cuatro, y recordando que había sido poco más que una sola hora en Calais-2

-Lo que un gran volumen de aventuras puede ser comprendido dentro de este pequeño espacio de vida, por lo que interesa a su corazón en todo, y que, teniendo ojos para ver lo que el tiempo y el azar son constantemente tendía a él como él journeyeth en a su manera, pierde nada de lo que justamente puede poner sus manos sobre.- 3

-Si no va a salir algo, otra voluntad, no importa-'t es un ensayo sobre la naturaleza humana, tengo mi trabajo para mis dolores- , 't es suficiente-el placer del experimento ha mantenido mis sentidos y la mejor parte de mi sangre despierta, y había puesto el bruto a dormir. 4

Compadezco al hombre que puede viajar desde Dan hasta Beerseba, y llorar, 'T es todo estéril, por lo que es, y lo que es todo el mundo para él, que no se cultivan los frutos que ofrece. Declaro, dije, palmeando las manos alegremente juntos, que era yo en el desierto, me gustaría saber con qué en ella para evocar mi afecto.-Si yo no podría hacerlo mejor, me fijarlos en algunos arrayanes dulce, o buscar algún ciprés melancolía a conectarme a me cortejar a su sombra, y saludar con amabilidad para su protección-lo haría cortar mi nombre sobre ellos, y juran que son los árboles más bellos de todo el desierto: si sus hojas marchito, yo me enseñe a llorar, y cuando ellos se alegraron, me regocijan con ellos. 5

El S MELFUNGUS aprendido viajó desde Boulogne a París, de París a Roma, y ??así sucesivamente, pero salió con el bazo y la ictericia, y cada objeto que pass'd por se decolora o distorsionada.-Escribió un relato de ellos, pero 't no era más que la cuenta de sus sentimientos miserables. 6

Conocí Smelfungus en el gran pórtico del Panteón, que acababa de salir de ella.- 'T no es más que una carlinga enorme, 1 dijo.-Me gustaría que hubiera dicho nada peor de la Venus de Médicis, respondió que-en el que pasa a través de Florencia, había oído que había caído en desgracia a la diosa, y se utiliza su peor que una prostituta común, sin el menor provocación en la naturaleza. 7

I popp'd sobre Smelfungus nuevo en Turín, en su regreso a casa, y una triste historia de aventuras dolorosas tenía que decirle, "en la que habló de los accidentes se mueven por las inundaciones y de campo, así como de los caníbales que cada otro comer: la antropófagos "-que había sido flay'd vivo, y bedevil'd, y se utiliza peor que San Bartolomé, en todas las etapas que había llegado en.- 8

-Voy a decirle a él, exclamó Smelfungus, al mundo. Es mejor decirle, le dije, a su médico. 9

Mundungus, con una inmensa fortuna, hizo todo el recorrido, pasando de Roma a Nápoles, desde Nápoles a Venecia-desde Venecia a Viena a Dresde a Berlín, sin una conexión generosa o anécdota agradable para decirle de, pero había travel'd de frente, sin mirar ni a la derecha ni la izquierda, no sea amor o piedad le deben seducir a salir de su camino. 10

La paz sea con ellos! si se encuentra, pero el cielo mismo, era posible llegar a tales ánimos, querría objetos para darle.-Todo espíritu gentil vendría volando sobre las alas del amor a aclamar su llegada.-Nada las almas de Smelfungus y Mundungus oír hablar de, pero himnos frescos de alegría, éxtasis frescas de amor, y felicitaciones frescas de su felicidad común.-Me compadezco de todo corazón: han criado sin facultades para este trabajo, y era la mansión más feliz en el cielo de adjudicación y Smelfungus y Mundungus, estarían lejos de ser feliz, de que las almas de Smelfungus y Mundungus haría penitencia allí para toda la eternidad. 11

Nota 1. Vide S - 's Travels. [Volver]

No hay comentarios:

Publicar un comentario